Cradle of Aviation: 2da parte

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Updated: junio 23, 2020

La aviación fue una industria pionera en las llanuras de Hempstead fue la aviación. En julio de 1909, el aviador y fabricante Glenn Curtiss trasladó su base de operaciones desde su estado natal de Nueva York a Mineola.

Curtiss, a los mandos de su biplano, el Golden Flyer, rodeó el campo de la avenida Washington en la llanura durante más de 52 minutos, demostrando las capacidades del avión y obteniendo el premio Scientific American por un vuelo de más de 25 kilómetros (16 millas).

Unos 15 años después, las llanuras de Hempstead se habían ganado la denominación «Cuna de la aviación». El aeródromo de Hempstead Plains fue renombrado en 1917 a Hazelhurst Field, y nuevamente en 1918 a Roosevelt Field en la mitad oriental, y Curtiss Field al oeste. [3] Estas instalaciones y Mitchel Field proporcionaron el centro de actividad aérea privada e incluso militar del este de los Estados Unidos.

El vuelo más famoso desde las llanuras de Hempstead fue el viaje de 1927 de Charles Lindbergh a Francia. Del 20 al 21 de mayo, Lindbergh, a bordo del monoplano monomotor Spirit of St. Louis, fue el primer piloto en volar desde Estados Unidos en solitario y sin escalas a través del Océano Atlántico, desde Roosevelt Field hasta Le Bourget, París, en 33½ horas (Su nieto Erik Lindbergh repitió este viaje en 2002, 75 años después, en 17 horas y 17 minutos).

Los hermano Wright

Los hermanos Wright, Wilbur (Millville, Indiana, 16 de abril de 1867-Dayton, Ohio, 30 de mayo de 1912) y Orville (Dayton, Ohio, 19 de agosto de 1871-30 de enero de 1948), fueron dos aviadores, ingenieros, inventores y pioneros de la aviación, generalmente nombrados en conjunto, y reconocidos mundialmente como los que inventaron, construyeron y volaron el primer aeroplano del mundo de forma exitosa, aun cuando existe una cierta controversia sobre ello.

Al lanzarlo al aire con una catapulta externa, se consiguió un corto vuelo, suficiente para probar el sistema de viaje y control del avión. Se afirma que su primer vuelo se realizó el 17 de diciembre de 1903, en Kitty Hawk, a bordo del Flyer I.[1]

Su gran aporte al vuelo fue el control de viaje mediante el balanceo. Hasta entonces los aviones existentes tenían diseños que los hacían difíciles de controlar por no haberse considerado la necesidad de inclinar las alas para cambiar de dirección. Lo metódico y minucioso del trabajo de los Wright estableció las bases para el vuelo de los aparatos más pesados que el aire.

Construyeron una especie de túnel aerodinámico para medir la sustentación que producen distintos perfiles a distintos ángulos de ataque. Hicieron volar controladamente un aeroplano de 35 kg, construido con los pesados materiales de la época, con un motor de sólo 12 caballos de fuerza (actualmente un ULM similar, de 23 kg, vuela con 54 cv). Las actuales reproducciones del Flyer I son muy difíciles de volar, incluso en manos de pilotos expertos, ya que necesitan un impulso externo proporcionado, por ejemplo, por una catapulta.

El 22 de mayo de 1908 los Hermanos Wright patentan su invento: el aeroplano, en la oficina de patentes estadounidenses.

Los hermanos habían terminado el avión en 1905 y trataban de venderlo a diferentes países; Francia, Inglaterra y el propio Estados Unidos estaban interesados. Pero los hermanos Wright no querían mostrar el avión hasta que hubiera un contrato firmado con compromiso de compra. Nadie quería firmar el contrato sin ver los aviones (se creía que todo era un fraude porque casi nadie había visto a los hermanos volar, especialmente porque eran unos geeks de la época con pocos amigos de los medios de comunicación) y no podrían venderlos si lo enseñaban a la ligera.

Disponían de una patente sobre un método de vuelo, pero les había resultado complicado conseguirla y no era garantía de nada, sobre todo fuera de los Estados Unidos.

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